La campaña racista del Partido Comunista 
  Francés contra los proletarios inmigrados no es un hecho aislado sino 
  que forma parte de un ataque más general del Estado Francés y 
  frente a ello no podemos sorprendernos. Las agresiones comando dirigidas por 
  los alcaldes "comunistas" contra el "hogar" de trabajadores 
  de Malí, las expulsiones realizadas por los estalinistas en Bagnolet, 
  los violentos ataques físicos contra los delegados obreros en Saint-Denis, 
  la denuncia a la policía de toda ilegalidad (drogas, robos, etc.,) por 
  las cuales el PCF trata de demostrar su capacidad como órgano estatal 
  para reforzar el control de la inmigración y defender la legalidad capitalista 
  constituyen un complemento necesario de los ataques de los milicos oficiales 
  contra los inmigrados, las operaciones rastrillo, las expulsiones (Marsella, 
  Lyon, Paris), los asesinatos de proletarios inmigrados. Por otra parte, no debe 
  sorprendernos que el PCF realice este tipo de tareas sucias, racistas y policiales, 
  todo partido del orden burgués realiza, en un momento dado, ese tipo 
  de tareas. Para el propio PCF, la formación de cuerpos de choque parapoliciales, 
  de promover delatores, de realizar campañas xenófobas, no es asunto 
  nuevo: en la pre-Segunda guerra hizo, con otros partidos de izquierda y tomando 
  como base los sindicatos, una campaña similar, bajo la cobertura de la 
  defensa de "las condiciones de trabajo de los obreros franceses". 
  Se acusaba a los inmigrados (¡cómo hoy!) de aceptar condiciones 
  de trabajo muy duras, por salarios ridículos. Para que nos sorprenda 
  menos aún podríamos mencionar algunos ejemplos grandes, e incuestionables 
  en los que el PC jugo ese papal para policial en: Chile en 1970-73, Perú 
  1968-75, Uruguay 1968, Argentina (siempre), Cuba (1961
), Bolivia 1964-70; 
  pero toda lista es incompleta, pobre y limitada; pues los P"C" juegan 
  ese papel en cada momento, en cada fábrica, son, a través de los 
  sindicatos, la policía patronal permanente. Los que llaman a realizar 
  alianzas "tácticas" con ese tipo de agentes de la represión 
  estatal, son objetivamente colaboradores de la misma.
  Por lo tanto, no hay ni lugar a sorpresas ni tiempo para quejas, la hora es 
  a la solidaridad de clase, a la organización, a la formación de 
  grupos de autodefensa contra esos guardias civiles con carteles de "comunista".
  
 
  
  CO6.3.4 
    Subrayamos: La campaña racista del Partido "Comunista" Francés